VOLVIO EL EQUIPO!!!

El Cokeado recuperó lo que lo caracteriza, el trabajo en equipo, y en sólo quince minutos, con dos golazos del espantapájaros Tavecchio, terminó con las ilusiones de la Yeta, cosa que ya no es noticia, los tenemos de hijos...

Luego de una semana agitada en el mundo Cokeado, con acusaciones cruzadas por el bajo rendimiento y búsqueda de explicaciones en vano, el equipo hizo lo que tenía que hacer, volver a entrar a la cancha a jugar al fútbol y dejar el alma por el equipo.
Atrás quedaron las recriminaciones del partido (mas charlado que jugado) del sábado anterior. Lejos se fueron las ínfulas personales para dar paso a los objetivos colectivos...Porque en definitiva, poco importa si al gol lo hace el 9, el 7, o el 11, o si a la pelota sobre la linea la saca el 1, el 2 o el 10, si al fin y al cabo al asado del festejo se lo comen todos...(inclusive este humilde servidor), y porque que otra cosa sino por esos asados y esos festejo se juega este campeonato, por esas juntadas entre amigos a charlar los partidos y a regar dichas charlas, por esas barbacoas criminales que sólo los habitantes de Budapest saben hacer...
(Ah, me olvidaba, tengo que comentar el partido)
El encuentro fue favorable al borravino desde el primer minuto, el cerrojo de la defensa funcionó a la perfección, el arquero suplente se mostró seguro cada vez que fue llamado a actuar, el medio campo quitó y generó, y la delantera creó muchas situaciones de gol. Lo único criticable, fue la falta de efectividad a la hora de convertir, ya que el resultado pudo haber sido mas abultado.
En fin, el equipo funciono, se ganó, y volvió la conciencia de que cada uno es sólo un engranaje de esta gran maquinaria de jugar y tomar a la que hemos dado en llamar el Cokeado F.C..