Olé, Olé, Olé, Olé!!!!!!!

En un partido chivo el Cokeado sacó a relucir su chapa de equipo con mucho huevo, ya que perdia 1 a 0 con un gol mentiroso y mañanero (cosa que al cokeado no le gusta), y lo empató a pesar de que Funebreros se resguardo en el fondo y que el Gordo y el Flaco (los arbitros) no le cobraron un claro penal.
El partido empezó trabado en la mitad de la cancha, con un Cokeado buscando ser protagonista de las acciones. Pero en una jugada desafortunada, en que los defensores no pudieron despejar el peligro del área, Funebreros se encontro arriba en el marcador sin haber hecho meritos.
De ahí en mas el equipo "borravino" busco por todos los medios el empate que se le hizo esquivo durante todo el primer tiempo.
El segundo tiempo lo encontro al Cokeado yendo para delante con mas ganas de hacer el segundo gol antes que el primero. La desesperación por empatar y la mezquindad del planteo del rival hicieron desprolija la tarea del ataque. Y para colmo de males el "Gordo" no cobro un clarísimo penal que se vio hasta del aula magna.
Tanto fue el empuje del equipo, que luego de una serie de faltas cerca del área rival, en medio de un entrevero de piernas, le quedo la pelota boyando al goleador Gallardo, quien con un tiro cruzado infló la red y el pecho de la hinchada borravino.
De ahí en mas fue un monologo del Cokeado, que sólo paso un sobresalto cuando Funebreros se encontro con un tiro libre al borde del área, que afortunadamente tuvo destino de panza Nasereana. Pitazo final y penales.
El encargado de abrir la serie fue Marcelo Gallardo que con un toque sutíl al palo izquierdo del arquero puso el 1 a 0. Turno de Funebreros, el uno del Cokeado se paro en medio del arco y desplegando sus brazos y su melena le metio presión al rival. Este totalmente abatatado, y anticipando el destino que iba a correr su equipo, la tiró por encima del horizontal hasta el bosque autóctono; Cokeado seguía arriba 1 a 0. Luego llego el turno de "el alma mater" Tito Busso, que definió cruzado y puso el 2 a 0. El segundo penal de Funebreros fue un calco del primero. El encargado del tercero fue Maxi "el pejerrey" Sturniolo, que le pego al balón con la cara interna y lo hizo viajar derecho a la red, para poner el 3 a 0. El tercer penal funebrero encontró al Mono Cusi bajo un estruendoso grito que repetia al unisono "Se termina acá!!! Es tuya Equi!!!", y mas intimidante que en los dos anteriores se paro bajo los tres palos pensando mas en como festejar que en el penal que se venía, y es que no hay dos sin tres o no? Y si el penal anterior había sido un calco, el tercer pateador no quizo ser menos y lo pateó mas parecido aún. Gritos, corrida, y un abrazo de equipo, que al grito de Cokeado, Cokeado! lleno el silencio nervioso que rondaba la cancha del bajo.
Así el equipo Borravino se metió en semifinales por primera vez. Y ahora quién nos quita lo Cokeado?!